La Federación Española de Sociedades de Profesores de Matemáticas (FESPM), que engloba a 20 sociedades de toda España, ha enviado un escrito a los rectores de las principales Universidades españolas pidiéndoles poner fin a las restricciones establecidas sobre el uso de las calculadoras en las pruebas de acceso EBAU.

La FESPM ha elaborado un informe avalado por el Comité Español de Matemáticas en el que se establece que la calculadora es una herramienta que acompaña a los estudiantes en toda su etapa educativa. Por tanto, no se debería prohibir su uso en las pruebas de Evaluación del Bachillerato para el Acceso a la Universidad (EBAU) en algunas comunidades autónomas, tal y como está sucediendo en la actualidad.

La situación en España respecto al uso de la calculadora durante la etapa educativa y su admisión en las pruebas de acceso a la universidad es muy distinta a la del resto de países de la Unión Europea que consideran esencial su uso, especialmente el de la calculadora gráfica para los estudios de Bachillerato.

El informe Pisa corrobora los beneficios de la calculadora en el estudio de las competencias matemáticas. En países como Finlandia, Noruega, Suecia o Dinamarca, las calculadoras gráficas son necesarias en clase e imprescindibles en los exámenes finales. El uso de las nuevas tecnologías es una competencia evaluable. En Portugal y Francia, la calculadora gráfica lleva en las aulas más de 10 años y su currículum exige conocer su funcionamiento. Italia ha sido el último país que ha dado un paso en el avance educativo permitiendo su uso.

Desde la Federación se pide adaptar las pruebas de acceso a la Universidad a los nuevos tiempos, tanto en los contenidos como en el uso de las herramientas tecnológicas. Solicitan unificar las pruebas en todas las comunidades autónomas.

En Calculados apoyamos esta petición de la FESPM para poner fin a las restricciones en el uso de la calculadora. Esta herramienta es esencial para despertar el espíritu crítico y favorecer la relación de conceptos matemáticos.

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